Limpieza y desinfección.

LIMPIEZA Y DESINFECCIÓN.

 

La limpieza y desinfección de vehículos dedicados al transporte, por carretera, de animales de producción o de productos para la alimentación de dichos animales, sólo podrá realizarse en los centros autorizados.

La limpieza y desinfección de vehículos dedicados al transporte, por carretera, de subproductos de origen animal no destinados a consumo humano podrá realizarse en los centros autorizados o en las instalaciones o centros previstos al efecto en el Reglamento (CE) n° 1774/2002 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 3 de octubre de 2002.

La limpieza y desinfección deberá realizarse en el centro autorizado más próximo al lugar donde se haya procedido a la descarga de los animales.

Los vehículos de transporte, por carretera, de peces, la limpieza y desinfección se podrán realizar en el centro autorizado de la explotación de destino, en el centroautorizado de la propia empresa transportista más cercano a la descarga o en el centro autorizado de dichos vehículos más cercano a la descarga.

 

 

                                                                                Fig. 8. – Manguera de presión                    Fig. 9.- lavado del exterior del vehículo             

 

Los vehículos dedicados al transporte, por carretera, de productos para la alimentación de los animales de producción, deberán ser lavados y desinfectados con la frecuencia que se determine por la autoridad competente, en caso de epizootia o por otros motivos de sanidad animal.

 

No será obligatorio proceder a la limpieza y desinfección del vehículo de transporte en los movimientos de ganado respecto de los cuales no sea exigible la certificación oficial de movimiento.

 

PROCEDIMIENTO DE LAVADO Y DESINFECTADO.

Limpieza inicial en seco.

Esta etapa incluye la retirada de todos los restos orgánicos visibles (excrementos, cama, otros desechos). Resulta esencial, ya que los altos niveles de microorganismos patógenos presentes y la suciedad pueden reducir la eficacia de la limpieza y desinfección posteriores.

Las maniobras de trabajo pueden incluir cepillos, raspadores y palas. Se empezará por el interior del camión, trabajando desde la superficie superior hacia la inferior, prestando especial atención a las áreas difíciles de limpiar, tales como puertas y las paredes laterales. Se continuará con la parte externa de los vehículos, trabajando desde la parte superior a la inferior. No olvidar las rampas, las plataformas de embarque, la carrocería y las ruedas, los guardabarros y las llantas de las ruedas.

 

 

Limpieza inicial con agua (Prelavado)

Esta opción es la más empleada en los centros de limpieza y desinfección.

El vehículo se lava con manguera y agua a presión suficiente para arrastrar los sólidos, que serán recogidos en un foso para su posterior eliminación o aprovechamiento. La temperatura ideal del agua para esta operación está entre los 38 y 46 ° C.

En los vehículos de transporte por carretera de peces, esta primera limpieza se realizará de forma adecuada a las características de dicho transporte y de los vehículos, en especial en función del tipo de suciedad.

La limpieza con agua debe realizarse siempre comenzando por el punto más alto del vehículo y acabando por el más bajo.

 

Limpieza posterior (Lavado)

Después de la limpieza inicial, aún quedarán restos de material con un alto poder de contaminación. Se hace necesaria una limpieza posterior para quitarlos.

Se limpiará todo el vehículo, con agua caliente a presión, incluyendo ruedas, bajos y carrocería. La limpieza deberá realizarse con los elementos móviles del vehículo desmontados: pisos, separadores, jaulas. El agua será recogida en foso para su posterior eliminación o aprovechamiento.

                                                                                          Fig. 12.- Limpieza de la cabina del vehículo.                     Fig. 13.- Lavado de calzado.               

 

La cabina del conductor representa un problema. Todas las piezas desmontables, incluyendo las alfombrillas del suelo, la ropa, las botas, etc., se deberán quitar de la cabina y limpiar con detenimiento. Usar un cepillo para quitar cualquier resto de la cabina. Prestar especial atención a los pedales.

 

Un cepillo y un detergente para los pedales y otras áreas de la cabina serán suficientes para aflojar la suciedad antes del enjuagado. Aplicar seguidamente un plaguicida-biocida de uso ganadero.

 

El lavado con agua reduce la contaminación bacteriana de una forma importante. Cuando añadimos un buen detergente la contaminación se reduce aún más.

 

El uso, en esta fase, de un detergente, junto al empleo de agua caliente, (idealmente entre 49 y 77°C dado que algunos detergentes se vuelven inestables a temperaturas más altas), garantizará una buena limpieza y reducirá el tiempo del proceso.

 

Nivel de limpieza                                               Bacterias viables por cm2

Antes de la limpieza                                                 50.000.000

Después de un lavado simple                                    20.000.000

  Después del lavado con agua caliente y detergente                                100.000

Fuente: Gadd. 1999

Puntos a considerar para la elección de un detergente:

 

El detergente debería estar diseñado para su uso ganadero. Los detergentes industriales pueden ser insuficientes para tratar plásticos y metal.

Debe tener una buena actividad desengrasante. La grasa protege a los microorganismos gracias a las largas cadenas lipídicas.

Debe ser seguro tanto para animales como para personas. Algunos detergentes son seguros para la maquinaria, pero cuestionables para los animales y el hombre.

Las especificaciones de uso deber estar totalmente claras. Las condiciones de uso deber ser seguidas por el encargado de su manipulación con exactitud.

No debe interferir en la acción del plaguicida-biocida de uso ganadero.

No debe tener una aplicación muy complicada. No necesitará equipos especiales para su aplicación.

No debe dejar residuos. Su presencia puede hacer el suelo resbaladizo y proteger a los microorganismos.

Preferentemente debe ser alcalino (pH 9 a 12). Esto ayuda a disolver las grasas y proteínas siendo normalmente suficiente para una limpieza profunda.

Debe ser activo en condiciones de agua dura.

Aclarado de vehículo.

Gráfico de desinfección.

La acción espumante puede ayudar, pues incrementa el tiempo de contacto y reduce la cantidad de agua necesaria.

En esta etapa se eliminará toda la materia orgánica.

  • Los productos de limpieza más utilizados se incluyen dentro de los siguientes grupos:

Jabones: son compuestos resultantes de la combinación de hidróxido de sodio y grasa. Tienen la ventaja de ser biodegradables, aunque su eficacia es menor que la de la mayoría de los compuestos sintéticos dado que les afecta mucho la dureza del agua.

Detergentes: son mezcla de muchas sustancias. El componente activo, también llamado agente tensoactivo o surfactante es similar a un jabón, pero suelen ser productos derivados del petróleo, su misión es facilitar la penetración del agua, separando la suciedad de las superficies en las que se encuentra e impedir que esta se deposite de nuevo.

 

  • En función de su carga eléctrica y pH, se pueden dividir en:

Alcalinos: son buenos esporicidas y se enjuagan fácilmente, aunque pueden ser más o menos corrosivos en función de su pH. Uno de los más conocidos es el hidróxido de sodio (pH 12-14), el cual posee muy buenas propiedades germicidas, aunque para una limpieza convencional suele ser suficiente utilizar bases débiles (pH 9-12), menos tóxicas y corrosivas.

Ácidos: son muy efectivos como suavizantes y para remover los depósitos minerales. La mayoría son ácidos orgánicos, suaves, estables y menos corrosivos que los alcalinos. Se enjuagan fácilmente. También tienen propiedades de plaguicidas-biocidas.

Aniónicos: Son buenos detergentes, pero no tienen propiedades de plaguicidas-biocidas. Son los más usados.

Catiónicos: Tienen propiedades de plaguicidas-biocidas, pero no lavan bien.

No iónicos: No forman mucha espuma, suelen usarse para la formulación de lavavajillas.

Anfotéricos: Estos productos permiten una buena penetración del agua, son emulsionantes y son compatibles con los surfactantes aniónicos, no iónicos y catiónicos, se usan mucho en la formulación de champús.

 

  • Otros componentes destacables de los detergentes son:

Fosfatos complejos: son compuestos muy suavizantes del agua, con buena capacidad de emulsión, previniendo la redeposición de los minerales. Tienen el inconveniente de ser contaminantes para el medio ambiente.

Enzimas proteolíticas: sólo funcionan si se remoja previamente la superficie que va a ser limpiada, rompen las moléculas de proteína y eliminan manchas de restos orgánicos.

Silicatos solubles: Ablandan el agua y dificultan la oxidación de metales.

Carbonatos: Ablandan el agua.

Sulfato de sodio: Evita que el polvo se apelmace facilitando su manejo.

Compuestos quelantes: Son sales ácidas orgánicas y funcionan como suavizantes del agua y controlan la redeposición mineral.

Estabilizadores de espuma, Colorantes, Perfumes, etc.

 

Aclarado

Es la última fase del proceso de limpieza, previene que la suciedad se vuelva a depositar en las superficies limpias, también es necesario para eliminar los restos de detergente que pudieran inactivar los plaguicidas-biocidas de uso ganadero utilizados posteriormente, para evitar la excesiva formación de espuma conviene usar agua fría entre 7-13°C.

 

Desinfección

Aún después de que el vehículo esté completamente limpio habrá un nivel residual de organismos patógenos. EI propósito de la desinfección es destruirlos y lograr el nivel final de eliminación de microorganismos patógenos adecuado.

El proceso de desinfección se define como la reacción química que se lleva a cabo entre el agente infeccioso y el plaguicida-biocida de uso ganadero. Por lo tanto, si los patógenos se encuentran protegidos por tierra, polvo, estiércol, alimento o cualquier otra materia, no habrá contacto con el plaguicida-biocida de uso ganadero y no podrá haber efecto alguno. Esta es la razón por la cual es esencial que se lleve a cabo el proceso de limpieza antes del proceso de desinfección.

La desinfección del vehículo se llevará a cabo mediante el rociado de las partes externas y de la zona habilitada para el transporte del ganado, con solución plaguicida-biocida de uso ganadero autorizado, según la especie animal, subproductos o productos para la alimentación animal de que se trate y la situación sanitaria de la zona.

Durante esta operación, los pisos de la zona habilitada para el transporte de animales deben estar en posición de carga. Esta norma no será aplicable a los vehículos de transporte por carretera de peces.

Asegurarse de que todas las áreas quedan completamente desinfectadas, empezando desde el exterior del vehículo y trabajando hacia el interior.

Recordar que se deberá limpiar y desinfectar todo el equipo desmontable. Se deberá proceder de la misma forma para áreas como las ruedas, el guardabarros y las llantas.

Finalmente, retirar el camión y dejar escurrir y secar. Durante el invierno, dejar el camión aparcado en un área protegida para asegurar que no quede agua estancada que pueda congelarse.

Al trabajar con compuestos químicos, se deben tener en cuenta ciertas normas de seguridad:

  • Los compuestos deben ser almacenados y transportados de tal forma que se prevengan los derramamientos. Además, los envases deben etiquetarse para evitar que sean confundidos con otros compuestos.
  • El personal debe estar cualificado para manejar los plaguicidas biocidas de uso ganadero y los equipos.
  • La selección de un plaguicida-biocida de uso ganadero es el paso más importante en la preparación de un programa efectivo de bioseguridad operacional.

 

Los principales puntos a considerar en la elección de un producto son:

 

Eficacia.

El aspecto biocida de] producto debería asegurar un control efectivo de todos los microorganismos patógenos (virus, bacterias y hongos) que normalmente afectan a la especie en cuestión.

a prueba de eficacia contra el o los organismos que se quieren combatir de él mismo.

Es por lo tanto muy importante que el producto sea capaz de penetrar la materia orgánica. Por ello es esencial que tenga un alto poder detergente.

Seguridad.

  • Debe ser seguro de usar para el operario
  • Debe ser seguro para los animales y no dejar residuos en carne
  • Debe ser no corrosivo para los equipos
  • Debe ser seguro para el ambiente

 

Costo.

  • Debe tener una relación costo/beneficio favorable.
  • Debe producir beneficios económicos: disminuir mortalidad.
  • Una vez elegido el plaguicida-biocida de uso ganadero adecuado es necesario realizar un correcto uso del mismo para obtener los resultados deseados.

 

Algunos puntos a considerar:

Tasa de dilución usada. Se debe escoger aquel índice de dilución al cual el plaguicida-biocida de uso ganadero ha sido probado efectivo, contra los patógenos a eliminar. Se aconseja usar siempre la concentración necesaria para eliminar los patógenos más resistentes.

Volumen de aplicación. Una desinfección efectiva requiere que las superficies estén bien mojadas. EI mínimo aceptable es de 300 ml de la solución diluida por cada metro cuadrado de superficie a tratar. Todas las áreas a desinfectar deberán ser previamente limpiadas para eliminar la materia orgánica presente. El uso de un detergente biocida facilita y aumenta la efectividad del plaguicida-biocida de uso ganadero.

Tiempo de contacto. Todos los plaguicidas-biocidas de uso ganadero necesitan permanecer en contacto con los microorganismos un tiempo mínimo pasado el cual pierden su eficacia, pero no sus posibles efectos corrosivos, por lo que en función de los productos utilizados se debe considerar la necesidad de un aclarado.

Se deberá emplear un plaguicida-biocida de uso ganadero de amplio espectro y de probada eficacia. Se recomienda el uso de un producto con acción virucida, así como contra otros organismos patógenos.

 

Algunas de las posibles causas de fallos en la desinfección incluyen las siguientes:

Sobredilución del plaguicida-biocida de uso ganadero durante la premezcla o en la aplicación.

Limpieza incompleta o inadecuada. Inactivación o neutralización debido a presencia de líquidos residuales de la limpieza que no han sido adecuadamente eliminados antes de la aplicación del plaguicida biocida de uso ganadero.

Penetración o espectro insuficiente del plaguicida-biocida de uso ganadero.

Temperatura y humedad inadecuadas mientras están aplicándose los plaguicidas-biocidas de uso ganadero.

Inactivación o neutralización debido a presencia de líquidos residuales de la limpieza que no han sido adecuadamente eliminados antes de la aplicación del plaguicida-biocida de uso ganadero.

 

 

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